viernes, 23 de septiembre de 2011

sabiduria

Estaba tan cansado esa noche, que parecía un zombi
o una persona normal en tiempo de crisis,
En donde todo me agobiaba y molestaba
entonces decidí, caminar al costado del rio
un rio, con historias plenas, con días de luto
en fin, un gran compañero, lleno de sabiduría
Comencé a relatarle mis sufrimientos, me penas
eran tan largas las historias, y tan gustoso el paseo
que me saque los zapatos, para poder conectarme más con esa naturaleza virgen
entonces, sentí como la arena que rodeaba a la túnica dorada, que dios olvido en esta tierra


Pasaban las horas, pero el insomnio continuaba con su carrera
mientras yo estaba agotado, mirándome en el reflejo del agua
sentía bramidos del rio, como si respondiera a mis penas
ayudándome a olvidarlas, hacerme dar cuenta que no solo yo tenía problemas
que habría miles a fuera de la cama a esa hora, pidiendo ser escuchados
que nunca sería como la tapa de un envase completo, lleno de sabores y conocimientos,
que nadie necesitaba de mí, para poder llegar a ese producto sin igual
El alba, se acercaba a toda marcha, sin preguntar si las penas se habían olvidado
o si todavía hay gente fuera de su cama, tratando de reconciliar el sueño
tan cruel, tan macabro como los amores inexplicables
que mientras hacen feliz a algunos, otros andan penando por ahí
mientras todo esto ocurría, veía alimañas volver a sus cuevas

Yo con las entrañas retorcidas de la hambruna que llevaba conmigo
comencé a llorar, las gotas saladas recorrían mi cuerpo
mientras que los primeros rayos del sol chocaban en mis mejillas
transformando el llanto en el mágico arcoíris
transformando las penas, en maravillosos olvidos
mientras reconocía a un amigo que ocultaba su busto detrás de un gran arbusto
mientras ese hombre se acercaba a beber un poco de agua, lavarse la cara
y agradecía a la noche por haberlo acompañado a olvidar las penas
cautelosamente me despedí, e hice reverencia a la naturaleza
que tan sabia y olvidada, siempre ayuda a los que en las noches divagan sin pensar
con el sueño en sus ojos, y las preocupaciones en el hombro

No hay comentarios: