Hola me llamo Mohamed, mis padres pensaron que como el gran boxeador, yo tambien podría aguantar los golpes de la vida, pero esos golpes fueron muy duros.
A los 3 años yo andaba pidiendo agua de barrio en barrio, iba por los mercados, pero nadie, nadie tenía la suficiente como para convidarme un trago aunque sea, mi madre estaba enferma, y me mandaba a comprarle los remedios o alguna bebida “ mágica “ que hiciera olvidar sus dolores
mi padre trabajaba en los pozos de petróleo, entraba a trabajar a las 4 de la madrugada, y llegaba a casa a las 9 de la noche, cuando todo estaba oscuro, y en las calles salían los libertadores a amenazar la paz del lugar, entre tiros y el azar mi padre llegaba cada noche para traernos la plata, y la comida, pero casi siempre faltaba agua. Pero éramos como camellos, siempre soportábamos días sin ese mineral tan valioso para algunos y tan común para otros.
mi padre trabajaba en los pozos de petróleo, entraba a trabajar a las 4 de la madrugada, y llegaba a casa a las 9 de la noche, cuando todo estaba oscuro, y en las calles salían los libertadores a amenazar la paz del lugar, entre tiros y el azar mi padre llegaba cada noche para traernos la plata, y la comida, pero casi siempre faltaba agua. Pero éramos como camellos, siempre soportábamos días sin ese mineral tan valioso para algunos y tan común para otros.
En Argentina luchaban por la papelera que se estaba instalando en Gualeguaychu, la contaminación azotaba al mundo, y acá entre la desolación y la falta de agua, los días se hacían eternos, llenos de temores, los niños que jugaban conmigo andaban con sus extravagantes armas, creyendo ser un pacifista, mientras en realidad solo eran los alborotadores, pero… en este momento pienso que tuve que haberme unido para evitar tantas cosas.
Bueno, así pasaban los años, yo cumplía los 10, y veía como la responsabilidad tambien se hacía parte de mí, mi madre en sus agonizantes días, pedía que no deje a mis hermanos solos, que ayude a mi padre, que sea buen hijo, y que jamás olvide mis orígenes.
Mi padre estaba cansado del trabajo, y la paga ya no alcanzaba para nada, ahora en vez de olvidarse del agua, o la comida, era por el simple hecho que éramos 8 hermanos, hambrientos y llorones perturbábamos mucho sus oídos, y no quería llorar delante nuestro, por eso es que a veces tardaba días en llegar, hacia horas extras o ese era la excusa que inventaba, pero traía bolsas de comida, y un bidón para q nos durara el agua pura y cristalina
Mi padre estaba cansado del trabajo, y la paga ya no alcanzaba para nada, ahora en vez de olvidarse del agua, o la comida, era por el simple hecho que éramos 8 hermanos, hambrientos y llorones perturbábamos mucho sus oídos, y no quería llorar delante nuestro, por eso es que a veces tardaba días en llegar, hacia horas extras o ese era la excusa que inventaba, pero traía bolsas de comida, y un bidón para q nos durara el agua pura y cristalina
En esos días, en que mi madre nos abandonó con un último grito de cólera, atemorizando la comunidad, y los llantos que hacían coro a la desgracia, colmaban las horas. Entre esos momentos inolvidables, se escuchó la sirena, alarmando a los revolucionarios.
Hace tiempo se escuchaba el rumor de que EE. UU iba a tomar el control de nuestras tierras, algunos sentían que estaban seguros teniendo un arma en casa, pero otros, iban buscando lugares incognitos para huir, llenos de miedo, locura, y armas viajaban rápidamente por los caminos olvidados.
Pero nosotros NO TENIAMOS FORMA DE ESCAPAR, y no éramos los únicos, habían varias familias, repletas de pobreza quedaban mirando y explorando las pocas posibilidades de sobrevivir a esta amenaza, a la guerra del poder…
Hace tiempo se escuchaba el rumor de que EE. UU iba a tomar el control de nuestras tierras, algunos sentían que estaban seguros teniendo un arma en casa, pero otros, iban buscando lugares incognitos para huir, llenos de miedo, locura, y armas viajaban rápidamente por los caminos olvidados.
Pero nosotros NO TENIAMOS FORMA DE ESCAPAR, y no éramos los únicos, habían varias familias, repletas de pobreza quedaban mirando y explorando las pocas posibilidades de sobrevivir a esta amenaza, a la guerra del poder…
Fue ahí cuando entendí que aquellos revolucionarios estaban luchando por el “oro negro” y por la poca agua que quedaba en nuestro suelo.
Que no eran rebeldes sin causa… tome el arma de papa, un rifle de alto calibre, con mira telescópica, que usábamos para cazar en los días en que nada alcanzaba para llenar tantos estómagos, y me asome a la azotea del vecino, visualicé como llegaban las tropas llenas de furia y con sed de gloria y lingotes de oro, de medallas de reconocimiento y ascensos…pero cuando me di cuenta, ellos estaban confundiendo a mi familia con terroristas, en medio de un funeral, tomaron a mi padre, que tenía a mi hermano menor en sus brazos, lo maniataron y lo llevaron a 3 cuadras del funeral.
Que no eran rebeldes sin causa… tome el arma de papa, un rifle de alto calibre, con mira telescópica, que usábamos para cazar en los días en que nada alcanzaba para llenar tantos estómagos, y me asome a la azotea del vecino, visualicé como llegaban las tropas llenas de furia y con sed de gloria y lingotes de oro, de medallas de reconocimiento y ascensos…pero cuando me di cuenta, ellos estaban confundiendo a mi familia con terroristas, en medio de un funeral, tomaron a mi padre, que tenía a mi hermano menor en sus brazos, lo maniataron y lo llevaron a 3 cuadras del funeral.
No tuvieron ni el valor de mirarlo a la cara, pero dispararon, y al mismo tiempo en mi rostro nacía una nueva lágrima, había perdido a mis 2 padres el mismo día, entonces, mire a mis hermanos que estaban tan desolados… logre hacer 3 disparos certeros, hasta que visualizaron mi posición de ataque, pero creían que era más de uno el que disparaba, sin coraje, dispararon con una bazuca, pero no dio en el edificio en que estaba yo, solo mataron a más familias, y lo que quedaba de la mía.
Lloraba desoladamente, pero corrí hacia el desastroso lecho de muerte que había en frente mío, me camufle con escombros para que no me vean vivir, egoístamente escape del infierno, 19 días de camino, para lograr escapar, tenían todo rodeado, pero de alguna manera me las ingenie. Para poder contarles como las grandes potencias, disfrazan sus deseos con “ACTOS HEROICOS” solo para sustentar su país con oro u riquezas… sin importar a cuantos haya que matar
1 comentario:
bueno, esto lo hice en medio de la noche, pero no se como quedo.
trete de meterme en el lugar de una persona,y esperoq ue me hay salido bien contar una historia. en donde un hombre cuenta como sufrio en la infancia
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