amor sin frenos

Vos llegabas de un viaje de mochilas cansadas, como decían los caballeros de la quema
Pedias una jarra llena de agua, pero en mi mesa solo había una caña legui
Tomaste dos vasos, y huiste hacia mi cama
Aunque las sabanas no estaban tan limpias como parecían
Vos estabas acostada igual, como si posaras para Picasso
Preguntaste si dormiría contigo, pero yo estaba tan sucio que me dio pena decir que si
Entonces te pedí que me acompañes a bañarme
Y sin titubear llegaste corriendo para abrazarme
Sonreí, pero estaba todo sudado
Entré a la ducha, abrí la canilla y espere a que te desvistieras
Entraste rápidamente, y el agua comenzó a recorrer tus largos cabellos
Me hiciste caer en la tentación de quererte penetrar
Yo miraba esos labios rojos como la granada, pulposos y dulces como los higos
Vos con impunidad acariciabas mi cuerpo
Arañándome la espalda, y el pecho
Yo como tonto, te mordí el cuello
Como si fuera un pendejo inexperto
Entonces comencé a descender hasta tus grandes senos, que imitaban a las grandes montañas rocosas
Jugué con ellos, y te mordía lentamente los pezones
Vos mordías tus labios en forma de S y emitías un gemido lento y suave
Me despeinabas con el agua y tus deseos
Los vidrios empañados de pasión acompañaban nuestra agitación
De repente me agache para contemplar tu pubis desnudo
Sin nada que ocultase tu hermosura vaginal
Te tome por el culo, y apreté fuertemente, eran 2 pelotas de futbol
Redondas y duras a más no poder
Te ordene que pusieses una pose parecida a la de los animales
Para poder penetrarte, vos virgen y pura te sonrojaste
Pero no te negaste, y obedeciste
Luego tome con mis manos a tus senos para sujetarte y no calleras al suelo
Mientras empujaba con fuerzas un animal con rudeza
A dentro de tu cuerpo, vos gritabas desaforadamente
Tirando a bajo los muros que tapaban nuestros actos
Salvajes y amorosas que pocos seres los pueden hacer
Pocos, con el amor que se merecen
Muchos con objetivo  de sacer su sed de sexo desenfrenado
Los minutos pasaban rápidamente mientras te pervertía la mente
Entonces un fuego interno parecido a un volcán
Erupcionè entre tus piernas, bañándote de alegrías y pasiones
Entonces, tome un jabón de la ducha, y te limpie lentamente, vos con una mirada llena de cansancio me besaste y dijiste que me amabas
Después te seque suavemente mientras te llevaba a recostarte en mi cama